DE LA ‘A’ A LA ‘Z’ (2.11.07)
Disclaimer: Card Captor Sakura pertenece a Clamp.
Resumen: Mi vocabulario está compuesto por ti.
Ropa
Desde pequeña mostraste un gran interés por el mundo de la moda, y eso es evidente al recordar los vestidos que cosías para mi hermana. Hay que reconocer que tenías talento y una gran inventiva. Tenías la capacidad de resaltar los mejores atributos de la personas con un simple trozo de tela.
Antes llevabas el típico uniforme a la escuela, pero cuando no lo llevabas siempre te ponías ropa simple y cómoda para estar por casa o para salir con los amigos. Nunca dedicabas mucho tiempo a tu imagen.
Cuando decidiste que iba a ser tuyo, como me confesaste una vez, empezaste a arreglarte más. Y lo cierto es que lo noté. Se te veía tan linda con las prendas sencillas y confortables, pero debo decir que cuando te veía arreglada y más atrevida mis reacciones eran impredecibles.
Ya no eran pantalones tejanos, sino faldas por encima de la rodilla que dejaban ver tus moldeadas piernas. Ya no eran suéteres anchos, sino camisetas ajustadas que acentuaban tus magníficas proporciones. Ya no eran zapatos planos, sino sandalias de colores que estilizaban tu esbelta figura. Llevabas pendientes que hacían apetitoso tu cuello, y collares que se perdían en tu escote, y pulseras que daban un toque de elegancia a tus finas muñecas.
Pero no se puede negar que te ves mejor desnuda.
Notas de la autora: Touya es un hombre, y los hombres tienen en la cabeza un par o tres de preocupaciones: la comida, el deporte y las mujeres... ¡Es broma!
Dejad vuestros comentarios, y vuestras sugerencias, que ayudan mucho!!
Saludos, Mery
Disclaimer: Card Captor Sakura pertenece a Clamp.
Resumen: Mi vocabulario está compuesto por ti.
Ropa
Desde pequeña mostraste un gran interés por el mundo de la moda, y eso es evidente al recordar los vestidos que cosías para mi hermana. Hay que reconocer que tenías talento y una gran inventiva. Tenías la capacidad de resaltar los mejores atributos de la personas con un simple trozo de tela.
Antes llevabas el típico uniforme a la escuela, pero cuando no lo llevabas siempre te ponías ropa simple y cómoda para estar por casa o para salir con los amigos. Nunca dedicabas mucho tiempo a tu imagen.
Cuando decidiste que iba a ser tuyo, como me confesaste una vez, empezaste a arreglarte más. Y lo cierto es que lo noté. Se te veía tan linda con las prendas sencillas y confortables, pero debo decir que cuando te veía arreglada y más atrevida mis reacciones eran impredecibles.
Ya no eran pantalones tejanos, sino faldas por encima de la rodilla que dejaban ver tus moldeadas piernas. Ya no eran suéteres anchos, sino camisetas ajustadas que acentuaban tus magníficas proporciones. Ya no eran zapatos planos, sino sandalias de colores que estilizaban tu esbelta figura. Llevabas pendientes que hacían apetitoso tu cuello, y collares que se perdían en tu escote, y pulseras que daban un toque de elegancia a tus finas muñecas.
Pero no se puede negar que te ves mejor desnuda.
Notas de la autora: Touya es un hombre, y los hombres tienen en la cabeza un par o tres de preocupaciones: la comida, el deporte y las mujeres... ¡Es broma!
Dejad vuestros comentarios, y vuestras sugerencias, que ayudan mucho!!
Saludos, Mery